El maldito discurso de Stanford

En el año 2005 Steve Jobs pronunció su célebre discurso en la Universidad de Stanford. No recuerdo cuando lo escuché por primera vez, pero debió ser alrededor de 2007. Reconozco que ese día me subió la adrenalina y me imaginé el inmenso poder de persuasión que ejercería Steve Jobs sobre sus empleados y seguidores.

Desde entonces, habré escuchado ese discurso más de veinte veces, de hecho, lo suelo proyectar en clase a mis alumnos.

Y reconozco que no me canso nunca de escucharlo.

Sin embargo, siempre había creído que el discurso hablaba de motivación, de emprendimiento, de liderazgo, de éxito, de creatividad, de innovación empresarial, de superación.

Y siempre volvía a verlo en busca de ideas para nuevos proyectos.

Hace poco comprendí que en realidad el maldito discurso de Stanford no hablaba de nada eso.

Simplemente hablaba de la vida y de cómo vivirla.

Ni más ni menos.

Por si no lo has visto, te adjunto el enlace.

Y mientras te lo piensas, yo voy a volver a verlo.